El catedrático Javier Arístegui, uno de los dos españoles en el informe del Grupo Intergubernamental de Expertos en Cambio Climático


El catedrático de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria Javier Arístegui es uno de los dos científicos españoles, junto a Íñigo Losada, de la Universidad de Cantabria, que han participado en la elaboración del informe del Grupo Intergubernamental de Expertos en Cambio Climático (IPCC) de la ONU sobre los impactos del cambio climático en los ecosistemas oceánicos, costeros, polares y de montaña.

El "Informe sobre el océano y la criosfera en un clima cambiante" -SROCC, por sus siglas en inglés-, ha contado con el análisis de más de un centenar de expertos de 36 países entre los que se encuentran los expertos españoles.

Este informe ha sido presentado en Madrid, en un acto público, junto con la ministra en funciones para la Transición Ecológica, Teresa Ribera.

Javier Arístegui es profesor de Ecología y Director del "Servicio Tecnológico Marino" (SITMA) en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), donde ha coordinado cursos en biogeoquímica marina y oceanografía biológica desde la década de los 90 hasta ahora. Arístegui ha prestado servicio a la comunidad científica como organizador de conferencias nacionales e internacionales, además de ser revisor en decenas de revistas internacionales, coeditor en jefe de Deep Sea Research II, editor asociado de "Frontiers (Biogeochemistry)" y editor invitado en "Progress in Oceanography". Durante los últimos 25 años, ha trabajado en la dinámica de los ecosistemas pelágicos, incluidos los estudios sobre ecología y ecofisiología del plancton, oceanografía microbiana y biogeoquímica y, junto con otros colegas, ha sido pionero en estudios sobre la contribución del carbono orgánico disuelto en el océano oscuro.

El informe de la ONU avanza que el nivel del mar podría subir más de un metro de aquí al año 2100 si se mantiene el actual aumento de las temperaturas y advierte de que eso podría obligar a desplazar a millones de personas. El análisis de ese panel evidencia que el calentamiento climático también ha subido la temperatura de los océanos, que son más calientes, más ácidos y menos productivos, y que fenómenos extremos como El Niño vayan a ser cada vez más frecuentes y severos.