Una docente de la ULPGC analiza en The Conversation por qué las mujeres cobran pensiones más bajas tras jubilarse

21 Jul 2025

Carmen Grau Pineda enumera las medidas que se aplican para corregir esta brecha

La profesora titular de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social, Carmen Grau Pineda, firma en la plataforma de divulgación The Conversation el artículo “Detenidas en el tiempo: en España las mujeres siguen cobrando peores pensiones que los hombres”, en el que analiza la brecha de género en los ingresos tras la jubilación, un asunto sobre el que la profesora ya ha disertado en artículos anteriores.

Grau Pineda pone sobre la mesa los datos de junio de 2025 de la Seguridad Social, que demuestran que, de media, las mujeres cobran 532 euros menos que los hombres en sus pensiones contributivas de jubilación. Ésta es una de las diferencias más altas de Europa, y se prolonga al tener las mujeres mayor esperanza de vida.

Según la autora “la raíz del problema está en que el sistema de pensiones se basa en las trayectorias laborales”, y las de las mujeres, históricamente, han sido más irregulares a causa de factores como “trabajos a tiempo parcial, interrupciones por cuidado de hijos o familiares, menor estabilidad laboral. Todos estos factores se traducen en menos años cotizados y menores bases de cotización”.

Los avances en igualdad legal no se han traducido en menores desigualdades reales, porque en la práctica las mujeres parten de una situación de desventaja frente a los hombres, y a este respecto sentencia que “una norma que trate por igual a quien tiene una carrera laboral larga y estable, y a quien la ha tenido interrumpida por cuidar a otras personas penaliza, sobre todo, a las mujeres”.

La profesora alude a tres medidas clave que se han puesto en marcha para reducir la brecha, las “acciones positivas”, que tienen como fin “incidir directamente sobre el cálculo de las pensiones para compensar las desigualdades de género”. La primera es conocida como “ficciones de cotización”, medidas que reconocen como cotizados “periodos en los que no se ha trabajado, siempre que estén vinculados al cuidado de hijos o familiares”. La segunda es la integración de lagunas, es decir, rellenar con bases mínimas los meses sin cotizar para que no afecten demasiado a la pensión real.

La tercera medida ha generado más controversia, y es el complemento, introducido en 2021: una cantidad de 36€ que “se añade a la pensión de las personas con hijos que han visto afectada su carrera profesional. Está pensado especialmente para mujeres, que lo reciben de forma preferente. Los hombres solo pueden acceder a él si demuestran una pérdida profesional significativa y que su pensión es inferior a la de la madre del hijo en común”. El Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha cuestionado este complemento hasta en dos ocasiones, al considerar que favorece a las mujeres sin base objetiva suficiente, lo que perpetúa el mito del varón pensionista discriminado.

Ante este panorama, la profesora plantea que, a medio plazo, habría que repensar si es más conveniente “optar por acciones positivas indirectas (como favorecer la conciliación y la corresponsabilidad en el cuidado, y la presencia de mujeres en espacios tradicionalmente masculinos) que, a la larga, impactan sobre las bases de cotización, fundamentales en el cálculo de la pensión”.

The Conversation España es el principal canal de divulgación del conocimiento que emana de las universidades. La ULPGC se adhirió en febrero de 2020 a esta plataforma, tal y como se ha auspiciado desde la CRUE-Universidades españolas. Los investigadores e investigadoras de la ULPGC han publicado más de 250 artículos en este canal. The Conversation cuenta con ediciones en Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Francia, Indonesia y África, además de la edición en español.