Concierto del cantautor Javier Krahe en el Paraninfo de la ULPGC

09 Mayo 2003

09/05/03

El miércoles día 14 de mayo, a las 20.30 horas, en el Paraninfo de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (c/ Juan de Quesada, 30. Vegueta) el músico Javier Krahe ofrecerá un concierto en el que volverá a hacer gala de su buen hacer y calidad en el género musical satírico que ahora presenta con su último disco Cábalas y cicatrices. Este concierto se enmarca dentro de la programación de Músicas en el Paraninfo que organiza el Vicerrectorado de Cultura y Deportes que dirige Alejandra Sanjuán-Hernán Pérez.

Las entradas se pondrán a la venta a partir del 5 de mayo en el teletique 902 405 504, al precio de 6 euros para la comunidad universitaria y jóvenes; y 12 euros para el público en general.

Javier Krahe es el rey del género musical satírico, que en los años 80 vivió su momento de máximo esplendor con La Mandrágora, café-concierto donde se encargó de renovar la canción después de los años del franquismo junto a Alberto Pérez y Joaquín Sabina. Fue el primero que pronunció la palabra "gilipollas" en un programa de televisión pública, y en una canción, lo que en aquellos años era un hecho para lanzar a la fama.

Quienes le conocen lo definen como un surrealista del hiperrealismo, que es al mismo tiempo mordaz y tierno, apasionado y serio, alegre y dramático. Nos demuestra que lo humano es de risa, con su humor inteligente que brilla con luz propia.

Con seis décadas de vida, Javier Krahe sigue siendo un joven compositor que es la antiestrella por excelencia. Sus conciertos nunca se parecen entre sí, porque en cada uno existen ocurrencias diferentes; en general, goza riñendo y ridiculizando a todas aquellas personas e instituciones que no son de su cuerda hasta provocar la carcajada.

Su nuevo disco Cábalas y cicatrices continúa la tradición de historias de sexo, amor, alcohol y crueldad furtiva. Grabado en el Café Central con su grupo habitual, formado por Javier López de Guerena (guitarra), Fernando Anguita (contrabajo), Andreas prittwitz (clarinete y flauta) y Jimmy Rios (percusiones), este CD es más romántico pero no ha perdido causticidad. El Gran Wyoming dice de este disco y de este cantautor que "Javier, al no haberse perdido ante la oferta mundana, y haber resistido su cuerpo al uso de las tentaciones que una vida honrada lleva inherentes, incrementa su saber día a día, y si bien su manía de reflexionar le pasea por jardines laberínticos de donde una mente sana difícilmente saldría indemne, a veces llega a lúcidas conclusiones invisibles para el común de los mortales y que plasma en canciones sublimes. (...) Este disco es tan bueno que no hay por donde cogerlo. Es literatura esencial, necesaria, tal vez de otro mundo, el de los monstruos, que ante su obra no queda más remedio que quitarse el sombrero, o poner cara de idiota porque el que no se entera, lo es. Nunca nadie ha dado tanto por tan poco".