Una nueva patente avala la colaboración de la ULPGC y la ULL en el estudio de la degradación de los materiales

•    Se trata de una celda que permite estudiar cómo se degradan materiales y los gases que surgen del fenómeno
•    Una aplicación puede ser la mejora del acero quirúrgico y de materiales empleados en braquets, implantes dentales o traumatológicos
•    La OTRI de la ULPGC trabaja en la difusión del elemento para transferir la investigación a la empresa


Hasta ahora no había forma de estudiar determinados materiales en condiciones de estanqueidad si estos desprendían gases, por lo que no era posible evolucionar en campos de tanta importancia como el de la corrosión o la catálisis.

Pero esta situación ha cambiado con la creación de un innovador dispositivo de medición gracias al que es posible realizar estudios electroquímicos de materiales que desprenden gases como reac-ción a la manipulación realizada. Y todo ello en condiciones de es-tanqueidad y con inclinación y superficies variantes.

La innovación es, además, resultado de la colaboración entre la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y la Universidad de La Laguna, que llevan años colaborando en distintos estudios. En esta ocasión, los responsables del desarrollo han sido los investigadores Ricardo Souto, Vicente Mena, Ignacio De La Nuez y Juan José Santana, firmantes del dispositivo de medición para la obtención de medidas electroquímicas en una muestra, con patente concedida.

Un cilindro muy especial

Se trata de un gran avance para el campo de la investigación que, a simple vista, se presenta como un cilindro con una tapa donde pueden ubicarse diferentes grados de inclinación respecto a la horizontal y sobre diversos materiales. 

Cuenta con un vaso de expansión para los gases y una membrana flexible para trabajar en condiciones de total estanqueidad, por lo que no escapan los líquidos presentes en su interior. Y el hecho de tratarse de un espacio estanco es favorable también para el trabajo con distintos tipos de atmósferas: con aire, bajo nitrógeno, helio, etcétera.

En principio, los estudios a desarrollar en esta celda de laboratorio se están orientando hacia el estudio de nuevas aleaciones que sean fuertes frente a los efectos corrosivos, entre otras aplicaciones. Estas aleaciones tienen base magnética, lo que las hace reactivas y, por eso, desprenden muchos gases. 

Materiales con estas condiciones pueden encontrarse en muchos lugares, por lo que el dispositivo se presenta como una gran ayu-da para multitud de ámbitos, es decir, es de aplicación multidisciplinar.

Gracias a este invento se podrán analizar las aleaciones de base magnesio usadas como implantes en el cuerpo humano, como el acero quirúrgico y el titanio (braquets, tornillos y placas para hue-sos, etcétera). Y de esta forma ayudar al futuro de estos materiales para que sean más seguros en su uso en el cuerpo humano.

De esta forma se podría rediseñar la aplicación para mejorarla y hacerla más duradera en el tiempo.

Pero esta aplicación no es más que un pequeño ejemplo, ya que permite también estudiar las características biológicas de sustratos sólidos y otras muchas más, como mejoras en los combustibles.

Es un dispositivo pensado para uso en laboratorio especializado en estudio de materiales, catálisis o sistemas biológicos. Ayuda a desvelar mecanismos de corrosión o catalíticos o biológicos, por lo que los beneficios a la sociedad pueden ser muchos.

Trabajan con la Universidad de La Laguna desde hace años. En el marco de esa constante colaboración, los equipos han descubierto la posibilidad de aprovechar la implicación de estos trabajos para el desarrollo de este invento completamente innovador. “Se trata de dos universidades ‘pequeñas’ en lo que a estos desarrollos se refiere. Y precisamente la unión es lo que permite sacar adelante realidades como esta”, comenta Juan José Santana, uno de los investigadores.

En su equipo no solo cuentan los cuatro investigadores sino que les han ayudado estudiantes y colaboradores a lo largo de los últimos 7 años en concreto.

Futuro

Además de un artículo descriptivo del dispositivo, los investigadores colaborarán en otras iniciativas para difundir los logros alcanzados. 

Los investigadores afrontan ahora la fase de divulgación del invento y la de localizar empresas interesadas en este desarrollo, para lo que la Oficina de Transferencia y Resultados de Investigación (OTRI) de la ULPGC gestionada por la Fundación Parque Científico Tecnológico de la ULPGC es fundamental, con su labor de transferencia de la investigación a la empresa.

Empresas que pueden estar interesadas en esta celda de trabajo pueden ser las de materiales de laboratorio o de desarrollo de materiales para estudios electroquímicos. Además, puede interesar a laboratorios que trabajen con técnicas electroquímicas, para los que este dispositivo puede ser muy interesante.