El turismo mejora el bienestar de los residentes, concluye un estudio de la ULPGC

15 Jul 2025

Cruzando los datos de la OCDE y de Eurostat, los investigadores analizaron once variables que miden la calidad de vida de 197 regiones turísticas europeas, incluida Canarias

Un estudio desarrollado por investigadores de la ULPGC concluye que hay una correlación positiva entre los niveles de bienestar de la población residente y la llegada de turistas, tras analizar los 11 indicadores que maneja la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) cruzándolos con los datos que Eurostat recopila sobre pernoctaciones turísticas en las regiones europeas.

El interés por conocer cómo impacta el turismo en las personas que residen en las regiones receptoras llevó a los autores de este trabajo a emplear las bases de datos mencionadas para disponer de referencias y variables empíricas con las que medir el bienestar de la población en relación con la llegada de turistas. Así pues, se examinaron diez indicadores objetivos, como ingresos, salud y empleo, y uno subjetivo (satisfacción con la vida), en relación a una amplia muestra de 197 regiones europeas muy diversas, con diferentes grados de densidad turística, y agrupadas según el tipo de actividad económica predominante: primarias (más basadas en economía agropecuaria y pesquera), secundarias (industria), terciarias (sector servicios, entre las que se encuentra Canarias) y quinarias (las más desarrolladas, donde los sectores de alto valor añadido tienen mayor peso).

El estudio encontró que el turismo tiene un impacto positivo en todas las regiones, aunque con diferentes grados. Las regiones más industriales son las más beneficiadas, porque el turismo es un impulso a la diversificación; mientras que en las quinarias es donde menos se aprecia ese aprovechamiento a favor de la sociedad. En regiones como Canarias, donde el turismo ya ha alcanzado un grado de madurez importante, aumentar el número de visitantes aún puede generar efectos positivos, aunque se empiezan a percibir signos de estancamiento.

Los autores destacan la profundidad del análisis por la gran cantidad de datos, variables y regiones estudiadas, subrayando especialmente el hecho de que se ha medido el desarrollo turístico por pernoctaciones y no por turistas recibidos, ya que en este último caso, las métricas no distinguen entre estancias largas o cortas, por lo que el dato de pernoctaciones ofrece una imagen más precisa y real del turismo en una región.

A la luz de estas conclusiones, los autores del estudio también señalan que es necesario que las regiones más turísticas trabajen en estrategias para impulsar sectores económicos alternativos, y que al mismo tiempo fomenten industrias de alto valor vinculadas al turismo, como nuevos modelos de negocio, uso de tecnologías e inteligencia artificial aplicada al sector o diseño de planes de desarrollo turístico vinculados a la sostenibilidad.

La revista Tourism Review publica este trabajo, que lleva la firma de Jacques Bulchand Gidumal y Santiago Melián González, investigadores del Instituto Universitario de Turismo y Desarrollo Económico Sostenible (TIDES), y de Sara M. González Betancor, coordinadora del Grupo de Investigación Análisis interdisciplinar de retos sociales (AIRES)